Los trastornos alimentarios, como la bulimia y la anorexia, son enfermedades mentales graves que afectan a millones de personas en todo el mundo.

Estos trastornos implican patrones de alimentación y comportamientos poco saludables con un impacto significativo en la salud y el bienestar tanto de quienes los padecen, como de la familia y personas cercanas que intentan ayudarles.

En este artículo, exploraremos cómo la bulimia y la anorexia pueden influir en las experiencias y desafíos durante las vacaciones, y brindaremos consejos prácticos para ayudar tanto a quienes luchan contra estos trastornos como a quienes los rodean para sobrellevar mejor este periodo.

El impacto de la bulimia y la anorexia durante las vacaciones

El verano es una época en la que muchos esperan con ansias disfrutar de las vacaciones, relajarse y pasar tiempo con sus seres queridos.

Sin embargo, para aquellos que luchan contra la bulimia y la anorexia, este periodo puede ser desafiante y lleno de ansiedad.

Los cambios en las rutinas diarias, las comidas en restaurantes y las celebraciones centradas en la comida pueden desencadenar sentimientos de estrés y desencarrilar el proceso de tratamiento y recuperación.

Desafíos en las rutinas y la convivencia familiar

Estrés por las comidas fuera de casa y celebraciones

Durante las vacaciones, es común que las comidas se realicen fuera de casa, ya sea en restaurantes o bares. Para alguien que lucha contra la anorexia o la bulimia, esto puede ser un desafío adicional.

La exposición a una variedad de alimentos y la falta de control sobre su preparación pueden generar ansiedad y desencadenar comportamientos poco saludables.

Carlos, un joven que se enfrenta a la anorexia. Durante las vacaciones, se encuentra con amigos en restaurantes y bares, donde la comida se convierte en el centro de atención.

Carlos se siente atrapado entre el deseo de disfrutar de la compañía de sus amigos y el temor a enfrentarse a los alimentos que le generan ansiedad. Cada vez que se encuentra en estas situaciones, debe hacer un esfuerzo adicional para mantener su enfoque en la recuperación.

Para él es importante establecer límites y comunicar sus necesidades a sus amigos. Puede ser útil elegir restaurantes que ofrezcan opciones de alimentos compatibles con sus hábitos de comida.

Además, practicar técnicas de relajación antes de las salidas y tener distracciones preparadas, como la música o juegos de mesa, pueden ayudar a Carlos a mantenerse centrado y reducir la ansiedad.

Es esencial que sus amigos comprendan y apoyen sus esfuerzos por recuperarse, evitando comentarios que puedan desencadenar pensamientos negativos o sentimientos de culpa.

Consejos para mantener tu recuperación

Si estás lidiando con la bulimia o la anorexia durante estas vacaciones, aquí tienes algunos consejos que pueden ayudarte a sobrellevar los retos y desafíos:

1. Mantén rutinas y horarios

En la medida de lo posible, trata de mantener tus rutinas y horarios de comidas. Esto puede proporcionarte un sentido de estabilidad y control, incluso cuando las circunstancias cambien durante las vacaciones. Programa momentos para las comidas y procura respetarlos, adaptándolos a las circunstancias de las vacaciones.

2. Busca opciones de alojamiento con cocina

Si es factible, elige alojamientos con cocina para poder preparar tus propias comidas. Esto te dará la libertad de seleccionar los alimentos que se ajusten a tus necesidades y evitar situaciones que puedan desencadenar ansiedad. Planifica tus compras de alimentos y elabora menús que te resulten cómodos y seguros.

3. Busca distracciones y actividades físicas

Encuentra distracciones saludables que te ayuden a liberar la ansiedad, como la meditación, la lectura o la música. Estas actividades pueden ser especialmente útiles en momentos de tentación o ansiedad relacionados con la comida.

El cerebro no entiende el NO: «No pienses en un elefante verde»…demasiado tarde verdad? Decirte a ti mismo que NO quieres pensar en la comida, hará que pienses todavía más en ella. La mejora solución es cambiar el enfoque, prestar atención a otra actividad distractora.

Además, realizar actividades físicas como paseos, natación o ejercicios suaves puede ser beneficioso para mantener un equilibrio emocional y promover la liberación de endorfinas.

4. Comunícate con tus personas de confianza

No tengas miedo de expresar tus sentimientos y preocupaciones a personas de confianza. Compartir tus experiencias puede aliviar la carga emocional y brindarte apoyo durante las situaciones desafiantes.

Ya sea que hables con un amigo cercano, un miembro de la familia o un profesional de la salud, la comunicación abierta y honesta puede fortalecer tu capacidad para afrontar los desafíos.

5. Mantén tu actividad social

No te aísles durante las vacaciones. Intenta mantener tu actividad social y participar en actividades que no estén centradas en la comida. Pasar tiempo con amigos y seres queridos en otros entornos puede ayudarte a desviar el enfoque de la comida y disfrutar de la compañía.

Organiza salidas al aire libre, excursiones o actividades recreativas que no estén directamente relacionadas con la comida para promover la diversión y la conexión social.

Consejos para acompañar en la recuperación

Si tienes un ser querido que lucha contra la bulimia o la anorexia, también puedes desempeñar un papel importante en su bienestar durante las vacaciones. Aquí hay algunas pautas para ayudarles:

1. Planifica actividades no relacionadas con la comida

Programa actividades que no estén centradas en la comida, como excursiones, juegos al aire libre o visitas culturales. Esto puede proporcionar distracciones saludables y reducir la ansiedad relacionada con la alimentación.

Al ofrecer alternativas de entretenimiento, estarás ayudando a tu ser querido a disfrutar de las vacaciones sin que la comida sea el centro de atención.

2. Si coméis fuera, busca opciones compatibles

Cuando planifiques salidas a restaurantes o bares, busca opciones de alimentos que sean compatibles con los hábitos de comida de tu ser querido.

Asegúrate de que haya platos en el menú que cumplan con sus necesidades dietéticas y que le brinden opciones saludables. Esto permitirá que tu ser querido se sienta incluido y respaldado durante las comidas fuera de casa.

3. Demuestra empatía y evita comentarios perjudiciales

Es fundamental mostrar empatía hacia los sentimientos y desafíos que enfrenta tu ser querido. Evita hacer comentarios que puedan hacerle sentir culpable por tener que cambiar los planes o adaptarlos debido a su situación clínica.

En lugar de centrarte en su apariencia física o sus elecciones alimentarias, enfoca la atención en actividades y conversaciones positivas que promuevan el bienestar emocional y la conexión.

4. Brinda apoyo emocional

Es esencial que demuestres a tu ser querido que estás ahí para apoyarlo en su proceso de recuperación. Escucha activamente cuando necesite hablar y ofrece palabras de aliento y comprensión.

Recuerda que la recuperación de un trastorno alimentario lleva tiempo y esfuerzo, por lo que tu apoyo incondicional puede marcar la diferencia en su bienestar durante las vacaciones y más allá.

Busca ayuda profesional

A veces las vacaciones suponen un reto emocional tan importante que pueden hacer peligrar el proceso de recuperación, en esos casos es importante buscar ayuda profesional para reenfocar nuestra mente y evitar así la recaída.

Mar Sánchez desde el gabinete psicológico de Neuromotiva y lleva más de diez años realizando el neuroacompañamiento de personas que padecen ansiedad, trastornos alimentarios y fobias desde un enfoque integral y sistémico.  Si crees que necesitas ayuda para afrontar una situación de este tipo solicita ahora tu cita:

Las vacaciones pueden ser desafiantes para aquellos que luchan contra la bulimia y la anorexia, pero con apoyo y una mentalidad centrada en el cuidado y la recuperación, es posible enfrentar estos desafíos.

Tanto si estás lidiando con un trastorno alimentario como si tienes un ser querido que lo padece, recuerda que no estás solo. Busca ayuda profesional, mantén una comunicación abierta y encuentra formas de disfrutar de las vacaciones sin que la bulimia y la anorexia se interpongan en tu camino hacia el bienestar.

Todos merecemos disfrutar de un verano pleno y feliz, y con el apoyo adecuado, podemos hacerlo realidad.

Deja una respuesta