El duelo es una experiencia universal que, tarde o temprano, todos enfrentamos. Cuando perdemos a un ser querido, se desencadenan una serie de mecanismos psicológicos que pueden influir profundamente en nuestra forma de sentir, pensar y actuar.
En este artículo, exploraremos esos mecanismos, aprenderemos a identificar cuándo un duelo puede volverse problemático y ofreceremos pautas para hablar sobre la muerte con niños y adolescentes. Además, abordaremos por qué es tan importante buscar apoyo psicológico y cómo herramientas como el EFT-Tapping pueden ayudar en este proceso.
El duelo suprimido sofoca. Hace estragos dentro del pecho y esta forzado a multiplicar su fuerza.
¿Qué es el duelo?
El duelo es una respuesta natural ante la pérdida. Puede ser una reacción a la muerte de un ser querido, pero también a otros tipos de pérdidas, como una ruptura, la pérdida de un trabajo o incluso un cambio de estilo de vida.
El duelo es complejo y cada persona lo experimenta de forma única, pero algunos patrones psicológicos comunes suelen aparecer en este proceso.
Mecanismos psicológicos que se desencadenan en el duelo
Durante el duelo, nuestra mente y cuerpo atraviesan diversas etapas, aunque no necesariamente de forma lineal. Estas son algunas de las fases psicológicas más comunes que se experimentan en el proceso de duelo:
- Negación: Al principio, muchas personas luchan por aceptar la realidad de la pérdida. Es una forma de autoprotección; nuestra mente se niega a creer lo sucedido. Frases como «esto no puede estar pasando» o «no lo creo» son comunes en esta etapa.
- Ira: Una vez que la realidad comienza a asentarse, surge una ira profunda, que puede estar dirigida hacia uno mismo, hacia otras personas o incluso hacia el ser querido fallecido. Preguntas como «¿por qué me pasó esto a mí?» o «¿por qué él/ella?» son comunes.
- Negociación: En esta etapa, intentamos recuperar el control sobre la situación a través de pensamientos como «si tan solo hubiera hecho esto de manera diferente» o «quizá si hubiese actuado de otra forma, esto no habría sucedido». La culpa es frecuente en este punto.
- Depresión: Es aquí donde el peso de la pérdida se siente con mayor intensidad. Es un momento de profundo dolor y tristeza. Las personas en esta etapa pueden sentirse abrumadas, agotadas y sin ganas de seguir adelante.
- Aceptación: Finalmente, la aceptación no significa «superar» la pérdida, sino aprender a convivir con ella. En esta etapa, las personas comienzan a encontrar un sentido a su vida sin la presencia de la persona que han perdido.
Señales de alarma: Cuándo el duelo se vuelve problemático
Aunque el duelo es una parte natural de la vida, existen momentos en los que puede complicarse y volverse crónico o no superado. Aquí te dejamos algunas señales de alarma a las que estar atento:
1. El duelo persiste durante años sin alivio
Si después de varios años la intensidad del dolor no disminuye y la persona sigue sin poder retomar sus actividades diarias, puede ser indicativo de un duelo complicado.
2. Incapacidad de hablar sobre el ser querido fallecido
Evitar cualquier conversación o recuerdo sobre la persona que ha fallecido, o reaccionar de manera extrema ante cualquier mención de ellos, puede señalar que el proceso de duelo no está avanzando de manera saludable.
3. Aislamiento social extremo
Cuando el dolor empuja a la persona a aislarse de su entorno, evitando contacto social y compromisos laborales o familiares, es importante buscar ayuda.
4. Cambios drásticos en el comportamiento
Un cambio radical en los hábitos alimenticios, de sueño, o en la forma de interactuar con los demás puede indicar que la persona necesita apoyo profesional.
5. Pensamientos recurrentes sobre la muerte
Si la persona comienza a tener pensamientos suicidas o deseos de reunirse con el ser querido fallecido, es fundamental buscar ayuda de manera inmediata.
Cómo hablar de la muerte con niños y adolescentes
Uno de los desafíos más grandes que enfrentan las familias en situaciones de duelo es comunicar la pérdida a los niños y adolescentes. Aquí te damos algunos consejos para abordar este delicado tema:
- Usa un lenguaje claro y apropiado para su edad: Los eufemismos como «se ha ido» o «está en un lugar mejor» pueden confundir a los niños pequeños. Es importante ser claro y directo: «falleció» o «murió» son palabras que, aunque duras, son necesarias para que los niños comprendan la realidad.
- Fomenta el diálogo abierto: Deja que los niños y adolescentes hagan preguntas y expresen sus emociones. Cada niño procesa el duelo de forma diferente, pero saber que pueden hablar abiertamente sobre lo que sienten es crucial para su bienestar emocional.
- Valida sus emociones: Es importante reconocer sus sentimientos, sin minimizarlos o intentar “arreglar” lo que sienten. Decirles que está bien estar triste, enojado o confundido les permitirá procesar sus emociones de manera saludable.
El EFT-Tapping como herramienta para enfrentar el duelo
El EFT-Tapping es una técnica terapéutica que combina elementos de la acupresión y la psicología energética. Se basa en la idea de que los bloqueos emocionales afectan el flujo energético del cuerpo, y mediante el tapping en puntos específicos, es posible liberar estas emociones y reducir el malestar.
En situaciones de duelo, el EFT-Tapping puede ser una herramienta valiosa para reducir la ansiedad, la tristeza profunda y el estrés que acompaña la pérdida. A través de la combinación de técnicas de psicoterapia y tapping, los individuos pueden encontrar un alivio más rápido y aprender a manejar sus emociones de una manera más efectiva.
No sabes lo fuerte que eres hasta que ser fuerte es la única opción que tienes
¿Por qué es importante recurrir a un psicólogo durante el duelo?
El duelo, en especial cuando se vuelve complicado, puede tener un impacto devastador en la vida de una persona. En estos momentos, el apoyo de un psicólogo es esencial para facilitar el proceso de sanación. Un profesional capacitado puede ayudar a la persona a identificar y procesar sus emociones, a entender por qué se siente de cierta manera y a encontrar herramientas para enfrentar la realidad sin que el dolor le paralice.
Además, en situaciones donde el duelo está afectando las relaciones familiares o la dinámica diaria, el psicólogo puede mediar y ofrecer estrategias para mejorar la comunicación y el apoyo mutuo.
Mar Sánchez, psicóloga y coach experta en gestión emocional lleva más de 10 años acompañando a personas de todas la edades que atraviesan un duelo complicado, ayudándoles mejorar su bienestar y equilibrio emocional.
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